Descripción
En Calidad de Aire, contamos con equipos especializados que permiten monitorear y medir de manera continua la concentración de radón en los edificios. Estos niveles de radón pueden experimentar cambios significativos a lo largo del tiempo, fluctuando incluso en períodos cortos, como horas, días y estacionalmente. Por lo general, las concentraciones de radón tienden a ser más altas durante el invierno en comparación con el verano, y también suelen ser más altas durante la noche que durante el día.
Nuestro equipo técnico evalúa cada situación de forma individualizada para determinar la cantidad apropiada de equipos necesarios y su ubicación precisa. Además, recopilamos información sobre la temperatura, humedad relativa y presión atmosférica para garantizar condiciones externas controladas según la norma ISO 11665-5.
Ofrecemos detectores pasivos de radón que permiten llevar a cabo mediciones durante períodos prolongados, que pueden variar desde 3 meses hasta 1 año. Estos detectores son utilizados en diversas áreas, como viviendas, centros educativos, centros de salud, garajes públicos, entre otros, y su evaluación se realiza siguiendo las directrices establecidas en la normativa IS-33 del CSN.
Una vez realizadas las mediciones, elaboramos un proyecto integral que incluye medidas correctivas para reducir los niveles de radón y garantizar la salud de los trabajadores o la familia afectada.
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